El sistema linfático drena linfa desde la mama a los ganglios linfáticos de la axila. Con el fin de determinar el potencial de propagación del cáncer de mama, es esencial examinar estos ganglios para ver si hay células cancerosas.
Cuando las células cancerosas se separan del tumor primario (original) y circulan a través de la linfa o la sangre hasta otros lugares del cuerpo, se puede formar otro tumor (secundario). Este proceso se llama metástasis.